En “Ideas sin fronteras” nadie tiene nombre ni bandera, las ideas fluyen como acciones bancarias. Sé tú el que apuestes por tu verdad. No te creas el mas sabio del mundo y parte del extranjero, ni el antiracista ni moderno.
Sé librepensador, persona anclada a sus verdades dudosas y juega con la vida.
Te reto a sorprenderme.
Todo lo que digas que sea exclusivo, pero no nuevo ni inesperado. No necesito ser un nuevo profeta.
No soy yo, “ideas sin fronteras”, eres tú, y cuando entres en el juego serán los demás. Esos de los que todos hablan y temen, los sin nombres, ni fronteras, ni banderas.